Siempre he tenido facilidad para transformar el sufrimiento en letras pero ahora tengo tanto dolor que se me atropellan las palabras. Me cuesta escribir de la misma forma que sonreír. Y tengo miedo a estar muy dañado. A que la parte que se ha ido de mí no vuelva jamás. Tengo miedo a rendirme ante todos aquellos que siempre dijeron que ninguna relación es eterna. Que nada perdura. Que todo es ficticio. Tengo miedo porque tú eras esa persona con la que conecté en todo. La que me hizo ver que el resto de mis relaciones anteriores era tan sólo el paso hasta llegar a ti. La que me hizo luchar hasta mi último aliento por lo que creía. Tengo miedo porque ya no quiero creer en el amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario